Esto nunca será mío
- Noches salpicadas de grumos de unicel a tu lado; donde tomamos brebajes que sólo tu sabes preparar.
- La compañía incondicional (que de repente encuentra condiciones poco propicias. Obstáculos infantiles, viruela postvejez).
- Paciencia. ¿Quién la necesita cuando el reloj corre tan rápido que ni siquiera lo ves?
- La capacidad de voltear el mundo de cabeza; de saltar riscos de un solo impulso; de ver a la cara a Perséfone en toda su furia.
- El olvido. Porque cada experiencia , cada piedra estrllándome forma un gran manto, que me sofoca en verano y me hiela en invierno.
Sé que esto nunca será mío.